Las cataratas se producen cuando el cristalino, la lente que se encuentra dentro del ojo, se opacifica total o parcialmente provocando, entre otros síntomas, una disminución de la agudeza visual del paciente. La principal causa de aparición de las cataratas es el paso del tiempo, aunque también existen las cataratas congénitas.
La única forma de eliminar las cataratas y recuperar la visión es extraer el cristalino dañado y sustituirlo por una lente intraocular (LIO) a través de una técnica quirúrgica conocida como facoemulsificación.
La operación de cataratas se realiza siguiendo estos pasos:
Habitualmente, se opera primero un ojo y, pasada una semana, el otro.
Básicamente, el oftalmólogo puede implantar dos tipos de lentes en función de las necesidades visuales del paciente:
El postoperatorio tras una cirugía de cataratas suele ser sencillo y el paciente puede volver a su rutina a las pocas horas de la intervención.
A pesar de la aparente simplicidad de la cirugía de cataratas, el paciente debe seguir las indicaciones del oftalmólogo que normalmente pasan por:
La simplificación de las técnicas quirúrgicas, unida a la búsqueda de la mejor calidad de vida para los pacientes, ha dado lugar a un cambio en los criterios que siguen los oftalmólogos a la hora de indicar la intervención.
En contra de la creencia popular, la cirugía de cataratas es más sencilla si las cataratas no están formadas del todo.
En la actualidad, la operación de cataratas se realiza lo más precozmente posible, una vez que el paciente comienza a notar sus síntomas y a percibir un deterioro de su calidad de visión.
Una vez realizado este procedimiento, el paciente puede irse a casa por su propio pie, con el ojo destapado y su recuperación visual será muy rápida.
“Es una técnica que se hace bajo anestesia tópica y tiene una duración de unos 10 minutos.”
Dr. Sergio Ares, oftalmólogo de Clínica Baviera.
La cirugía de cataratas mediante facoemulsificación tiene las siguientes ventajas para el paciente que decide intervenirse en Clínica Baviera:
Sin listas de espera.
Es ambulatoria. No precisa ingreso hospitalario.
Anestesia tópica (con gotas y sin pinchazos).
Procedimiento rápido.
No precisa puntos de sutura.
La visión se recupera en minutos.
Independencia inmediata. El paciente vuelve a casa por su propio pie.
Pocas molestias en el
post-operatorio.
Tras la operación de cataratas, la visión vuelve a ser totalmente normal y nítida. En la misma intervención también se puede corregir cualquier problema refractivo del paciente, como la miopía, la hipermetropía, el astigmatismo y la vista cansada (presbicia).
Tras una intervención de cataratas en la que se sustituya el cristalino por una lente monofocal, el paciente normalmente necesita gafas, bifocales o progresivas, para poder leer y enfocar objetos cercanos porque además de cataratas antes del tratamiento padecía vista cansada (presbicia).
Si la lente por la que sustituimos el cristalino durante la facoemulsificación es una lente intraocular multifocal podemos, no sólo eliminar las cataratas, sino ofrecer a los pacientes un rango de visión completo, desde leer un libro hasta ver la televisión, sin necesidad de gafas y para siempre. En Clínica Baviera empleamos lentes multifocales de última generación.
Conoce el testimonio de pacientes que se han realizado un tratamiento para las cataratas y que han recuperado su visión y su calidad de vida. Nuestros pacientes te lo cuentan.