¿Puede haber personas con los ojos de color rojo?

El color del iris de los ojos viene determinado fundamentalmente por la cantidad y distribución de melanina. De todos modos, también influyen otros pigmentos como el lipocromo. Además, existen enfermedades que pueden provocar que los ojos adquieran colores diferentes. 

¿Por qué hay personas que tienen los ojos de diferente color? ¿Puede alguien tener los ojos de color rojo? Resolvemos estas y otras dudas en las siguientes líneas.

¿Qué tipos de color de ojos poco frecuentes existen?

Hay personas con los ojos de color ámbar o amarillento, algo producido por la predominancia de lipocromo en el iris. Desde el punto de vista genético, no hay una explicación para esta coloración. Los ojos con un claro anillo de color castaño, amarillo o cobre alrededor de la pupila predominan en países europeos como Rumania, Francia, España, Suiza, Italia o Eslovenia. 

Por otro lado, los ojos violeta se deben a una mezcla de tonos rojos con reflejos azules. El resultado es un azul muy intenso. Se pueden observar, sobre todo, en personas con albinismo, aunque también en hombres y mujeres sin esta enfermedad. En realidad no hay ojos violeta, como tampoco los hay negros. El color depende de la cantidad de pigmento del ojo y el rango va desde el marrón muy oscuro, que se confunde con el negro, al azul. Algo distinto es que, por diversas razones, los ojos parezcan violetas.

En cuanto a los ojos negros, cuando resulta prácticamente imposible diferenciar el iris de la pupila, son frecuentes entre personas de ascendencia africana, asiática y, en menor proporción, indígenas americanos. Sólo aproximadamente el 1% de las personas en todo el mundo tienen los ojos así. Si se sufre aniridia, enfermedad poco frecuente que provoca la casi total ausencia del iris, la cosa cambia, ya que, en estos casos, en realidad, no es que el iris sea negro, es que el paciente carece de esta parte del ojo . 

¿Qué determina el color de los ojos?

¿De qué depende el color de los ojos? Básicamente, de la información genética, de los cromosomas.

La melanina, pigmento oscuro que aporta la tonalidad a la piel, el cabello y los ojos, es una proteína. Su tipo y cantidad está codificada también en los genes. Su utilidad en los ojos es la misma que en la piel: protegerlos de la luz ultravioleta y de la luz visible de alta frecuencia. Por eso, cuanta más melanina contenga el iris, más oscuros serán los ojos y mayor protección tendrán frente a la luz.

Los ojos más comunes son los marrones, color café o castaños. Esta tonalidad se encuentra en más del 50% de la población mundial. Los ojos marrones tienen grandes cantidades de melanina en la parte anterior del iris. En cuanto a cantidad de melanina, le siguen los azules y los verdes. Menos comunes son los tonos negro, ámbar, violeta y rojo.

¿Qué relación existe entre el albinismo y ojos rojos?

También existen personas con los ojos de color rojo. Les pasa con mayor frecuencia a las personas albinas. La razón es que los rayos solares atraviesan el globo ocular y reflejan la hemoglobina de los vasos sanguíneos de la retina, ya que el iris carece de melanina completamente. 

Se estima que un 0,3% de la población mundial tiene el iris de este tono. En estos casos, es común que las personas padezcan, además, otros problemas visuales como fotofobia, estrabismo, miopía o astigmatismo.

Defectos refractivos y color de los ojos ¿existe relación?

No hay ninguna evidencia científica que relacione el hecho de tener los ojos claros con una mayor preponderancia de los defectos refractivos. 

Eso sí, en función de color del iris puede haber algunos cambios en cuanto a los tratamientos oftalmológicos a aplicar. Por ejemplo, las gotas para dilatar la pupila suelen tener un efecto más rápido, intenso y duradero en los ojos claros. Esto se debe a que el iris tiene menos pigmento y esto da como resultado un iris de menor grosor. Las gotas de dilatación tienen que atravesar todo el iris hasta llegar al músculo que abre y cierra la pupila. En los ojos marrones se encuentran con mayores dificultades, retardando y minimizando su efecto. En cambio, en los ojos claros sus efectos son más rápidos y efectivos. También hay algunas diferencias a la hora de aplicar determinados tratamientos,  como aquellos que se utilizan para el glaucoma.

Una cosa que sí está comprobada es que a las personas que tienen los ojos claros les suele molestar más la luz intensa. La razón se encuentra en la retina, concretamente, en el epitelio pigmentario. Los ojos negros o marrones tienen mayor cantidad de melanina que los claros. Por eso suelen absorber mejor la luz, evitando que ésta rebote en el fondo del ojo.

Fuentes

• Los cinco colores de ojos más raros – ABC
• Albinismo – Mayo Clinic