Desterrando mitos sobre la toxina botulínica (II)

¿La toxina botulínica previene la formación de arrugas?

Sí. Esta prevención se consigue por el efecto de la “parálisis transitoria” del movimiento de los músculos faciales, lo que impide la aparición de líneas de expresión que con el tiempo acaban convirtiéndose en arrugas.

¿Cuándo comienzan a notarse los primeros resultados?

Los resultados comienzan a ser visibles a partir del cuarto día tras la aplicación, y alcanzan la máxima visibilidad entre los 7 y 10 días después de la infiltración.

¿Cuánto dura el efecto de la toxina botulínica?

Los efectos son visibles hasta el tercer o cuarto mes y desaparecen prácticamente a los seis meses, momento en el que se debe valorar la repetición de la infiltración. Personalmente, recomiendo no infiltrar nunca antes de los seis meses para que los músculos hayan estado funcionando al menos un mes.

¿Qué ocurre una vez finalizan sus efectos?

Una vez finalizados los efectos de la toxina botulínica, el movimiento de los músculos faciales vuelve a ser el mismo que antes de su aplicación.

¿La aplicación de la toxina botulínica tiene efectos secundarios?

Los efectos adversos son poco frecuentes, leves y transitorios. Son de carácter local y dependen del área a tratar y de la técnica empleada. Por eso es fundamental que el especialista que realice el tratamiento, tenga conocimiento anatómico de las áreas faciales a tratar.

Doctora, de un tiempo a esta parte, escuchamos hablar mucho de la aplicación de esta toxina no solo para usos estéticos sino con también con fines médicos, ¿podría darnos más información al respecto?

Sí. La toxina botulínica cada vez tiene mayores usos médicos, en el campo de la oftalmología, en concreto en todo aquello referente a la oculoplastia y al tratamiento del estrabismo. La medicina ha experimentado importantes cambios en los últimos años, encontrando soluciones eficientes para problemas que antes tenían tan sólo tratamiento quirúrgico.

Los especialistas en oculoplastia de Clínica Baviera realizan tratamientos medico-estéticos para eliminar las patas de gallo, las arrugas del entrecejo y otras líneas de expresión faciales, con los métodos más modernos y eficaces, usando productos de la más alta calidad y con garantía médica profesional.