¿Qué gafas de sol le compro a mi hijo?

Con la llegada del buen tiempo y los días de sol, proteger los ojos de los más pequeños es muy importante. Todos estamos muy mentalizados sobre la necesidad del uso de cremas para proteger nuestra piel y la de los niños de los rayos del sol, pero todavía no estamos muy acostumbrados a hacer lo mismo con los ojos.

La incidencia de los rayos ultravioletas del sol en la retina puede generar problemas de visión, principalmente en los niños. Estos problemas, además, se pueden acumular y sus consecuencias se notarán en la edad adulta. Esta razón hace que sea fundamental crear un buen hábito en los niños para que usen protección en los ojos, más incluso que la que necesitamos los adultos.

Niña con gafas de sol

Pero, ¿qué gafas de sol son las adecuadas?

Aquí os dejamos algunos consejos:

• Elige unas con montura de plástico, ya que son la mejor opción para los niños en cuanto a durabilidad, comodidad, ligereza y coste.

• Recuerda que siempre hay que probarle las gafas al niño para asegurarse de que entre el puente y la nariz no queda espacio, y para que así no se le vayan cayendo.

• El material de la lente ha de ser policarbonato o cristal orgánico ya que son materiales más ligeros y prácticamente irrompibles. Esto es importante porque los niños siempre sufren más caídas y golpes por lo que un cristal delicado sería muy peligroso para ellos.

• Las gafas tienen que estar homologadas para evitar daños en la visión de los más pequeños. Ha de figurar siempre el sello de la Comunidad Europea así como la clase a la que pertenecen o la categoría de su filtro.

• El índice de protección recomendado es el número 3 (fuerte) ya que absorbe gran parte de luz con sus lentes oscuras y así evitamos que la luz dañe los ojos.

Si seguimos estas recomendaciones, la vista de los más pequeños estará protegida. También es importante que ellos elijan las gafas que más les gusten, así lograremos que se las pongan con más ganas.