¿Cómo corrigen las gafas los defectos de vista?

El método más antiguo para corregir los problemas de la visión producidos por defectos de refracción son las gafas graduadas o gafas de corrección de la vista. Dichos defectos pueden ser de tres tipos: miopía, hipermetropía y astigmatismo.

Los tres defectos de refracción

La miopía es un problema de refracción que provoca que la persona que lo padece perciba los objetos lejanos sin la suficiente nitidez. El motivo es que la imagen se forma delante de la retina (y no directamente sobre ella, que sería lo óptimo para tener una buena visión desde cualquier distancia) por uno de estos dos motivos o una combinación de ambos:

• El ojo es más alargado de lo normal.
• La córnea y/o el cristalino tiene una potencia excesiva.

La hipermetropía, en cambio, afecta a la visión cercana (aunque a ciertas edades también provoca visión borrosa en las largas distancias) por culpa de que la imagen se enfoca detrás de la retina, es decir, justo lo contrario de lo que ocurre en la miopía. La causa de este defecto puede deberse a una potencia inadecuada de la córnea o el cristalino, o bien a que el ojo es más corto que los parámetros considerados normales.

Finalmente, el astigmatismo (que muchas veces se presenta junto a alguno de los dos defectos anteriores) se produce porque la córnea presenta una irregularidad en la curvatura. El efecto es una mala visión desde todas las distancias.

¿Cómo corrigen las gafas estos defectos?

Las lentes graduadas se han utilizado desde hace mucho tiempo para corregir los defectos visuales ocasionados por características anatómicas del ojo. Éstos imposibilitan que la imagen luminosa que penetra en él a través de la pupila se forme exactamente en la retina.

La forma de corrección varía según el defecto refractivo de que se trate:

• Para los casos de miopía se utiliza una lente cóncava con el objeto de cambiar la dirección de la luz haciendo que la imagen se forme justo en la retina. Esto permite mejorar la visión de lejos de las  personas miopes.
• En el caso de la hipermetropía se utiliza, por el contrario, una lente convexa para que la imagen se forme sobre la retina y no detrás de ella, mejorando así la visión cercana de las personas con este defecto de la refracción. La lente convexa se utiliza también para las personas con vista cansada o presbicia.
• El astigmatismo se corrige con lentes que contrarresten la forma irregular de la curvatura de córnea.

Alternativas a las gafas

Para aquellos que no quieran usar gafas y lentillas existe la alternativa de operarse de la vista para corregir los problemas refractivos. La mayoría de personas son aptas para la cirugía refractiva láser, que permite, en la mayoría de casos, ver correctamente sin necesidad de lentes correctoras adicionales.

Son muchísimas las personas a las que la solución de las gafas graduadas o lentillas les resulta muy insatisfactoria, pero no se atreven a operarse por aprensiones o miedos, la mayoría injustificados, como se explica en esta guía. Su lectura resulta ideal para resolver dudas y eliminar falsas creencias sobre la cirugía refractiva, sus procesos, las personas candidatas, límites y expectativas.