Ardor en los ojos: causas más comunes del escozor y tratamiento

El ardor en los ojos es uno de los síntomas más comunes cuando algo en nuestra salud visual no va bien. Esta sensación tan incómoda se puede relacionar con multitud de problemas oculares, por lo que es importante saber identificar correctamente la causa de cada uno de ellos para poder aplicar el tratamiento más adecuado en cada caso. 

¿Qué es el ardor en los ojos?

El ardor en los ojos no es una enfermedad en sí misma, sino un síntoma que puede estar asociado a diferentes problemas de  salud visual. En general, al hablar de ardor en los ojos, se hace referencia a una sensación que suele ser descrita como picor intenso y escozor en la parte más exterior del ojo y que, debido a esto, obliga a los pacientes a tener que cerrar los ojos para reducir en parte esta sensación tan molesta. 

Como se ha mencionado, el ardor en los ojos es un síntoma que nos indica que algo en la salud visual no está funcionando correctamente. Por lo general, se trata de una sensación común cuando algún cuerpo extraño entra en contacto con nuestros ojos (humo, polvo, arenilla, elementos alérgenos, etc.). Estos cuerpos extraños también pueden provocar un derrame en el ojo. En estos casos, la primera medida que se suele recomendar pasa por lavar los ojos con abundante agua para eliminar cualquier resto que pueda generar ese ardor y otros problemas adicionales.

Sin embargo, el ardor en los ojos también puede estar causado por otros motivos diferentes, por lo que, sobre todo si se trata de un ardor muy intenso y prolongado en el tiempo, se recomienda acudir de inmediato al médico para que pueda llevar a cabo una exploración del paciente. 

¿Cuáles son las causas y tratamiento del ardor en los ojos?

Las causas que pueden desencadenar la sensación de ardor en los ojos son múltiples. Algunas de las más habituales son las siguientes.

Contacto con alguna sustancia irritante

Pueden ser de diversos tipos, desde el humo o la contaminación ambiental a productos químicos,  polvo o arena. En estos casos, la causa del ardor suele identificarse de forma rápida.

Tratamiento: Limpiar la zona con abundante agua suele ser suficiente para reducir el ardor y conseguir que desaparezca a los pocos minutos. Si no fuera así, se recomienda acudir a un médico de forma inmediata para que pueda evaluar al paciente. 

Alergias

Aunque los alérgenos constituyen en sí una sustancia irritante para los ojos del paciente, los síntomas que provocan deben ser tratados de forma diferente. Estos alérgenos pueden ser: polen, polvo, pelo de animales…

Tratamiento: Cuando se produce un ardor puntual e intenso es posible que la alergia se deba al contacto eventual con el alérgeno. En estos casos, es importante limpiar correctamente la zona. Sin embargo, también habrá que valorar la posibilidad de que el médico prescriba un tratamiento concreto para evitar otros síntomas de la alergia, que además del ardor en los ojos suele manifestarse con rinitis, estornudos y urticaria, entre otros.

Síndrome del ojo seco 

 Otra posible causa del ardor en los ojos la encontramos en una cantidad o calidad insuficiente de lágrima. Esto provoca que el ojo no esté correctamente lubricado, lo que implica que se irrite y termine apareciendo el ardor, que suele ir acompañado de enrojecimiento de la esclerótica y sensación de arenilla en los ojos.

Tratamiento: El tratamiento más habitual en este caso suele ser la aplicación de lágrimas artificiales para corregir la falta de lágrima natural del paciente. 

Infección vírica o bacteriana

Otro factor que favorece la aparición de ardor en los ojos son las infecciones, especialmente la conjuntivitis. Tanto en el caso de que se trate de una infección causada por un virus como por una bacteria, este problema produce ardor y escozor en los ojos, así como enrojecimiento, abundante lagrimeo, inflamación y, en el caso de las infecciones bacterianas, secreciones viscosas.

Tratamiento: El tratamiento más habitual será la aplicación de medicamentos que ayuden a curar la infección lo antes posible, así como mantener una correcta higiene de la zona afectada. Será necesario acudir al médico para que sea éste quien prescriba el tratamiento más adecuado en función del factor que haya desencadenado la infección. 

Blefaritis

La blefaritis es una enfermedad que se manifiesta con la inflamación de los bordes de los párpados y puede desencadenarse por diferentes causas. Entre los síntomas que se asocian a este problema podemos destacar: picor, ardor, irritación y aparición de una grasa o caspa que se deposita sobre las pestañas.

Tratamiento: El oftalomólogo puede optar por el uso de diferentes medicamentos (antibióticos, antiinflamatorios….) que siempre debe ir acompañado de medidas de higiene y cuidado personal.

Pterigión

El pterigión es un crecimiento anormal de tejido de la conjuntiva que invade la córnea y que provoca síntomas como lagrimeo, enrojecimiento, sensación de cuerpo extraño o ardor en los ojos. Estos síntomas serán más molestos a medida que el tejido vaya creciendo y pueden llevar a una pérdida de visión, en los casos más graves.

Tratamiento: Cuando el pterigión es pequeño se emplean tratamientos para reducir los síntomas y aliviar las molestias, como el uso de lágrimas artificiales. En los casos más graves, el oftalmólogo realizará una cirugía que consiste en la extirpación del tejido.

En cualquier caso, el ardor en los ojos es un síntoma que puede estar asociado a muchas causas diferentes. Debido a esto, si se trata de un problema recurrente, lo más aconsejable será visitar al oftalmólogo para que pueda llevar a cabo una evaluación del paciente y descartar otras posibilidades. 

¿Cómo puedo prevenir el ardor en los ojos?

El ardor en los ojos no siempre se puede prevenir, pero se pueden minimizar los riesgos de padecer este problema tomando las siguientes medidas:

• Evitar el contacto con agentes alérgenos, manteniendo las ventanas cerradas durante las temporadas de mucho polen o en días de viento y utilizando filtros de aire en el hogar para reducir los alérgenos en el aire.
• No frotarse los ojos para evitar irritaciones o la propagación de gérmenes o alérgenos.
• Usar gafas protectoras para nadar en la playa o en la piscina.
• Practicar una correcta higiene de manos. Es imprescindible lavarse las manos antes de tocar los ojos o la cara.
• Evitar el daño solar llevando gafas de sol homologadas.
• No compartir artículos personales, como las toallas, las fundas de almohada, los cosméticos o las gotas para los ojos.

¿Cuándo debo acudir al médico?

El paciente se debe poner en contacto con su oftalmólogo si percibe los siguientes síntomas:

• Dolor ocular.
• Sensibilidad a la luz.
• Disminución de la visión o visión doble.
• Aumento de la hinchazón en los párpados.
• Percepción de moscas volantes o destellos de luz.
• Secreción de los ojos espesa, verdosa o purulenta.
• Fiebre.
• Dolor de cabeza.

Conclusiones clave

Fuente

• Academia Americana de Oftalmología – Ardor en los ojos
• Medline Plus – Ardor: picazón y secreción del ojo